Entre tantas plataformas que te preguntan “¿sigues ahí?”, salas VIP que parecen salidas de un avión de lujo, y estrenos que duran menos que un meme viral, hay una experiencia que volvió con todo el estilo y el encanto del pasado: los autocinemas.
Esa joya retro que mezcla nostalgia con comodidad, donde puedes ver una película sin preocuparte por quién mastica fuerte al lado, ni por llegar puntual a los asientos numerados. Solo tú, tu coche, una cobija y el cielo como techo.
Los autocinemas regresaron y, spoiler alert: no fue solo una moda pasajera. Se quedaron porque ofrecen algo que muchos habíamos olvidado: ver una peli como experiencia, no solo como contenido. Y en una ciudad tan movida como la CDMX, eso ya es un lujo.

¿Por qué ver pelis desde el coche se siente tan bien?
Porque hay algo mágico en mezclar película con privacidad. Ir al autocinema tiene ese encanto particular de sentirte en tu propio mundo, donde nadie te mira ni te juzga. Puedes llegar en pijama, sin preocuparte por las apariencias, acomodarte como quieras y hacer pausa para sacar los snacks del asiento trasero como si estuvieras en casa.
El camino hacia la función también forma parte del ritual. Puedes poner tu playlist favorita, cantar a todo pulmón mientras cruzas la ciudad, y ya desde ahí empieza el mood cinéfilo. Además, te libras de los clásicos personajes incómodos del cine tradicional: el señor que no deja de hablar, la pareja que revisa el celular cada cinco minutos, o los que comentan cada escena como si fueran críticos de cine.
Y si llueve, ver la película a través del parabrisas empañado tiene su propio encanto. Las luces se difuminan, el sonido se vuelve más íntimo, y por un rato, parece que el mundo allá afuera se detiene.
Además, los autocinemas de hoy no son solo una pantalla gigante con sonido por FM. Algunos tienen servicio a la ventanilla, otros suman foodtrucks con cosas realmente buenas (olvídate de las palomitas caras y secas), y no faltan los que le meten producción: funciones retro, terror a medianoche, cosplay, actividades previas y hasta música en vivo.
¿Dónde revivir esta joyita en la CDMX?
Te dejamos algunos spots que han sabido combinar lo mejor del cine con lo más relajado del plan de fin de semana:

- Drive Cinema MX
Ubicado al sur de la ciudad, este autocinema en Coapa ofrece desde estrenos hasta clásicos legendarios, con programaciones especiales para fechas como Halloween o San Valentín. Ideal para ver pelis en pareja, entre amigos o con tu mascota, porque sí: ¡es pet friendly! Cuenta con dulcería con combos clásicos —hot dogs, nachos, palomitas—, aunque ojo: no se permite ingresar con alimentos externos. - Autocinema Coyote
El favorito de muchos. Con sedes en Polanco e Insurgentes, es uno de los más conocidos por su ambientación temática, excelente programación y ese aire retro irresistible. Su cartelera va desde películas recientes hasta joyas como El diablo viste a la moda o Diario de una pasión. Además, ofrecen snacks, malteadas, hamburguesas y más. El plan ideal si buscas una cita diferente o solo un poco de cine con estilo. - Autocinema del IPN
Así como lo lees. Dentro del Centro Cultural Jaime Torres Bodet, este espacio ofrece funciones especiales y ciclos de cine con entrada completamente libre. Solo tienes que estar atento a sus redes sociales para enterarte de las próximas fechas. Una opción cultural y accesible para revivir la magia del cine desde el coche.

¿Y por qué ir a un autocinema, en serio?
Porque es diferente, y en una ciudad donde todo va tan rápido, eso ya es mucho. Porque puedes parar el tiempo un rato, bajarle el ritmo al día, mirar una película sin distracciones ajenas y vivirla desde tu propio espacio. Porque a veces, en medio del caos, lo único que necesitas es ver una pantalla brillar frente a ti, con una historia que te atrape, una cobija sobre las piernas y el mundo apagado afuera del coche.

Checklist para una noche perfecta de autocinema:
- Tanque lleno y playlist armada.
- Una cobija ligera.
- Snacks personalizados (aunque también puedes pedir algo en el lugar).
- Cristales limpios.
- Un cargador por si tu coche no tiene batería para rato.
- Y alguien con quien compartir silencios cómodos o gritar juntos los sustos.
- Bonus tip: Llega temprano. No solo por los buenos lugares, también para disfrutar el ambiente. Algunos autocinemas tienen áreas para tomarte fotos, jueguitos o hasta presentaciones en vivo antes de la peli.

Así que ya lo sabes. En tu próxima noche libre, cambia el sofá por el asiento del coche, sal del algoritmo por un rato y déjate llevar por la magia de un autocinema. Porque a veces, lo más sencillo es lo más inolvidable. Y ver una película desde tu propio coche, mientras la ciudad corre allá abajo, puede ser justo lo que necesitabas.
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By Sasha Osuna