La segunda generación de Peugeot 2008 llega a México mostrando una evolución interesante no sólo en temas de diseño sino que también en equipo de seguridad, tecnología junto a un enorme salto de calidad que la posicionan como una alternativa interesante a vehículos de marcas de lujo en sus versiones base.
El look
Continuando la filosofía estética que planteó 3008 hace un par de año, su hermana menor es la primera en llegar a México con el rostro que presume tres zarpazos de león y un gran colmillo LED, estos como luz de día, además del guiño al pasado como el nombre del modelo en la orilla del cofre. Los rines son bitono que para la versión GT tienen un tamaño de 18 pulgadas y de 17 para GT Line, haciendo juego con el techo negro y la franja trasera que une las luces a modo de auto concepto.
La cabina es minimalista, con una pantalla táctil de 10 pulgadas al centro (de 7 pulgadas en la versión base) y los mandos tipo teclas de piano debajo, desde donde se acceden a menús como el del aire acondicionado, aplicaciones o ajustes. El tablero es de plástico suave con costuras verdes que también se encuentran en el volante y asientos, de Alcántara en el GT y tela en GT Line.
Por otro lado, el i-Cockpit es en 3D, lo que genera una visión muy interesante de la información del auto mientras manejamos. Esto se logra mediante dos pantallas, donde una proyecta la información desde arriba y la otra desde atrás, creando este efecto. En ella se pueden cambiar lo que queremos ver además de ser muy atractivo.
El manejo
La ruta seleccionada por la marca fue de la CDMX hacia Valle de Bravo, donde inicialmente nos pusimos al volante de la versión GT que monta el motor 1.2 PureTech de 155 hp y transmisión automática de 8 velocidades. A pesar de tener sólo 3 cilindros, la respuesta es bastante ágil con un turbo progresivo, mientras que la caja hace su trabajo de manera prácticamente imperceptible en modo Comfort, ideal para las zonas de la ciudad con muchas subidas. Ya entrados en carretera, el modo Sport mantiene los cambios por más tiempo además de otorgar sensaciones más vivas. Es fácil llevar ritmos de 140 – 150 km/h e incluso llegamos a 180 km/h sin percibir sonidos aerodinámicos pues nos explicaban que las ventanas también son laminadas para mayor insonoridad.
La suspensión resulta cómoda pues absorbe bien las imperfecciones del camino pero con buena comunicación sobre lo que sucede en las ruedas. En curvas se planta plan, siempre estable e incluso divertido. La dirección va endureciéndose conforme la velocidad y el hecho de tener un volante casi como de go-kart generan una sensación distinta, más envolvente con la conducción.
De regreso manejamos la versión GT Line que tiene el mismo motor pero con 130 hp y 6 velocidades, que aunque sonaría a que es más lento, la verdad es que no se percibe gran diferencia. Eso sí, como tiene menos velocidades que cambiar cuando se le exige, responde con mayor agilidad. Sin duda esta combinación mecánica va a ser sobresalir en ciudad mientras que la versión más potente es ideal para los que viajan mucho por carretera.
El equipo
Peugeot hizo mucho hincapié en que este nuevo 2008 viene equipado del mismo modo que en Europa, sin quitarle elementos para que el precio no se viera afectado. Todas las versiones traen 6 bolsas de aire, 8 en el caso de la GT, iluminación LED, rines de aluminio de hasta 18 pulgadas y ligeros cambios estéticos, como la parrilla, los faros o la forma de la palanca.
Sin embargo, a partir de la segunda versión ya tenemos el cuadro de instrumentos digital, pantalla táctil de 10 pulgadas y conforme se asciende encontramos carrocería bitono, quemacocos, asientos delanteros calefactados o monitor de punto ciego.
Lo que sí extrañamos son algunas otras asistencias a la conducción, como frenado autónomo de emergencia, asistente de mantenimiento de carril, alerta de tráfico cruzado, entre otros.
Las versiones
Peugeot 2008 ya está disponible en la red de distribuidores de la marca con cuatro versiones:
| 2008 Active | $391,900 |
| 2008 Allure | $444,900 |
| 2008 GT Line | $475,900 |
| 2008 GT | $506,900 |
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By Bruno Dagio